TRADUCTOR

domingo, 18 de noviembre de 2007

SEGURO E IMPUNIDAD MEDICA

Durante las últimas semanas se ha venido discutiendo respecto al denominado SOAT Médico. Se trata de que los ciudadanos que acudimos ante un médico, podamos tener la seguridad de que si el galeno actúa con negligencia y nos ocasiona un daño, seremos indemnizados.

A través de los medios de comunicación hemos podido tomar conocimiento de algunos de estos casos de negligencia médica, pero en ninguno de ellos los pacientes pudieron acceder a indemnización alguna o, lo que es peor, dichos médicos no fueron sancionados por el Colegio correspondiente. Esta es la realidad, por tanto es imperativo que algo se haga al respecto.

Esta mañana escuchaba a un representante de los médicos que indicaba que desde el año 1999 hasta la fecha “apenas” habían sido afectados 200 pacientes. No especificó si dichos pacientes habían quedado paralíticos, en estado vegetativo o estaban muertos.

Pero de una manera descarada, el supuesto medico decía que como eran pocos, no había necesidad de que se creara algún mecanismo para asegurar la indemnización de los afectados.

En la última catástrofe aérea murieron 150 personas y dichos hechos conmocionaron al mundo. En este caso, el susodicho medico nos pretende decir que si producto de la negligencia medica mueren 200 personas, no es para escandalizarse.

Pero respecto al tema hay dos vertientes que deben ser revisadas: la sanción y la indemnización. En el primer caso, todos sabemos que existe un espíritu de cuerpo en el Colegio Medico que lleva a cubrir la negligencia de sus afiliados.

En el segundo, si una persona quiere ser indemnizada por una negligencia médica, debe ir al Poder Judicial y esperar sentado varios años antes de que le sorprendan con una sentencia que en la mayoría de los casos le será adversa. Esto sin tomar en cuenta que quien es afectado por una mala practica médica generalmente se encuentra con una economía disminuida casualmente por las atenciones que ha requerido.

Si luego de tomar unos tragos subes a tu auto para regresar a casa y te detiene un policía, podrías ir a prisión hasta por cuatro años, sin que hayas atropellado a nadie. Sólo por la negligencia de manejar el auto con tragos encima.

Me pregunto que diferencia hay entre este negligente conductor y el medico que también en actitud negligente le causa un daño a un paciente. Pues si hay una diferencia. Quien es atropellado por un auto conducido por un ebrio tiene asegurado su tratamiento gratuito en cualquier establecimiento medico, mientras que en el segundo caso, el paciente se encuentra desprotegido.

Definitivamente es justo y necesario que todos los peruanos tengamos la posibilidad de, cuando menos, ser indemnizados frente a una negligencia médica. Respecto a quien debe pagar este seguro, por cierto que deben ser lo médicos, pues es a ellos a quien se atribuye la responsabilidad.

Algunos plantean que en el caso de los médicos que laboran en Hospitales del Estado, debe ser el Estado quien cubra el costo del seguro. Es decir, pretenden que por la negligencia de los médicos paguemos todos los peruanos.

Si bien es cierto puede haber algún grado de responsabilidad en el equipamiento del Centro Hospitalario, debe tenerse en cuenta que en caso de negligencia la responsabilidad es personal. Quizás lo mas justo sea que se establezca la responsabilidad solidaria del centro de salud y el médico, sin importar si se trata de establecimientos privados u públicos.

El debate ha comenzado y esperamos esta vez poder contar con un seguro que cubra los actos negligentes de malos médicos y que de una vez por todas se establezca un mecanismo distinto al de los colegios profesionales para sancionar con objetividad las faltas éticas de los profesionales de la salud.

1 comentario:

Unknown dijo...

Asumes que el SOAT medico evitara los procesos judiciales?, nada mas lejos de la realidad, no creo que apenas el "agraviado" diga que se cometio negligencia sea indemnizado.
Por otro lado no creo que la prensa sea la idonea en calificar que es una negligencia medica, puesto que eso le corresponde al juzgado, menos aun si los periodistas no tienen ni idea de el conocimiento medico